El comienzo del consumo de alcohol puede estar en la adolescencia, cuando todavía no se ha terminado de desarrollar el cerebro. Se considera que la adolescencia es hasta los 18 años pero ¿sabías que el cerebro no se termina de desarrollar hasta los 25 a 30 años?
Consumir vino, cerveza y cualquier tipo de destilados es perjudicial a cualquier edad pero si se hace antes de que el cerebro esté maduro puede producir daños en distintas zonas del cerebro afectando a las capacidades intelectuales del futuro adulto.
Adolescencia y consumo de alcohol
En la adolescencia el cerebro está en pleno desarrollo hasta los 25 a 30 años y el alcohol puede interrumpir este proceso. Esto tiene como consecuencias graves alteraciones en el pensamiento maduro del adulto.
Estos daños se dan en las áreas del cerebro que se encargan de las funciones cognitivas, del aprendizaje y de la memoria produciendo dificultad para crear y almacenar recuerdos y también dificultad para mantener la atención y la concentración.
Además, se ve afectada la conducta que se vuelve agresiva y afecta a las relaciones sociales.
¿Qué hace el alcohol en el cerebro del adolescente?
Las neuronas son células del sistema nervioso central que se encargan de recibir y decodificar la información en forma de señales eléctricas y químicas, en forma de impulso nervioso.
Se conectan entre sí para transmitir ese impulso nervioso y enviar información para que se realicen las funciones del organismo, tanto en el cerebro cómo en el resto del cuerpo. Esta transmisión del impulso nervioso es bloqueada por el alcohol porque se altera la conexión entre las neuronas. Un tipo de neuronas que se ven afectadas son encargadas de la memoria del razonamiento lógico.
También produce daños a nivel del córtex prefrontal que no termina de madurar hasta los 30 años. Se altera este proceso de maduración y se producen daños en las funciones cognitivas. Las consecuencias son:
- Dificultad para la toma de decisiones
- Falta de control en el comportamiento
- Problemas para planificar
- Disminución de la memoria de trabajo
- Falta de atención y concentración
- Problemas de aprendizaje
- Alteración de la función visuoespacial
- Alteraciones en el equilibrio de recibir y dar la información
Debido a todas estas alteraciones el volumen del córtex prefrontal, encargado de esas funciones, tiene un menor volumen.
Todas estas alteraciones se mantendrán en la edad adulta si no se deja de consumir a tiempo. Si el adolescente consume alcohol durante un tiempo y lo deja los daños causados provocan un bajo rendimiento académico hasta 4 años después.
Alcohol y otras drogas más duras
El consumo de alcohol abre la puerta al consumo de drogas más duras porque el cerebro necesita cada vez más estímulos y con mayor intensidad de los que produce el alcohol al que ya se ha acostumbrado con el tiempo.
Si junto con el alcohol se consume otro tipo de drogas los daños que produce el alcohol en el cerebro son mayores. Y hay que añadir los daños producidos por estas drogas más duras.
Otras consecuencias del consumo de alcohol
Hay otro tipo de daños por el consumo de alcohol y se producen a nivel de las relaciones sociales y el desarrollo habilidades y capacidades.
Al afectar al comportamiento éste se vuelve más agresivo y con menos capacidad de tener una comunicación asertiva con los demás. Y al afectar al aprendizaje y al razonamiento impide que se puedan adquirir las habilidades sociales necesarias para tener buenas relaciones con las personas de su entorno.
El alcohol conduce a un aumento de la violencia.
También afecta a las relaciones sexuales y a la salud ya que se tiende a realizarlas sin protección lo que conlleva un mayor riesgo de contraer enfermedades de transmisión sexual y de tener embarazos no deseados.
Y cómo ya sabemos, aumenta las posibilidades de accidentes de tráfico que es causa frecuente de muerte en jóvenes.
Por lo tanto, los adolescentes no deben consumir alcohol en esta etapa. En realidad, no hay que consumir alcohol en ninguna etapa de la vida pero si se hace no se debe empezar hasta que el cerebro esté desarrollado, proceso que finaliza a los 30 años.
Vida saludable y ocio son compatibles
En nuestra sociedad está muy vinculado el consumo de alcohol con la diversión y el ocio, y está muy normalizado.
Teniendo en cuenta todo el perjuicio que produce en nuestra salud y que es dañino a todas las edades, especialmente en la adolescencia, es importante que empecemos a considerar que es posible tener ese ocio y esa diversión sin consumir alcohol.
Se pueden tener momentos de ocio, de disfrutar de la compañía de familiares, de amistades o de otro tipo de reuniones sin necesidad de beber alcohol.
Por otro lado, todavía se oye el consejo de tomar una copa de vino tinto en las comidas porque es sano. Esto no es cierto, ya se ha demostrado que el alcohol daña nuestra salud y que los beneficios que pueden aportar otras sustancias que tiene el vino no compensa ese daño. La mejor bebida para comer es el agua, es la más saludable e imprescindible para nuestro organismo.
Loreto Serrano
Farmacéutica
Coach de salud y desarrollo personal